Verbos desencajados de sus cuencas
caen al río habitual de palabras que pasa bajo el puente
La corriente los arrastra, los desarma de sentido
y los deja flotando en su cascarón más obvio
En ese puente hice tu fotografía
El agua sigue su curso hasta perderse
por el túnel de un monumento municipal
bastante añejo que tiene los graffitis habituales
de una época sepia firmados por la lluvia
Tu foto muestra dos palabras desnudas
A punto de tirarme al río por rescatar algún verbo
con la etiqueta clásica de una colonia para el corazón
olvido que no se nadar en aguas de recuerdos turbios
y dejo que el piso me amarre con un pedazo de cobardía
Llega alguien al puente para una selfie justo donde posaste
Me marcho pues el ruido del torrente va aumentando
y el muro centenario del puente no puede devolverme
el silencio que le presté para componer mi encuadre
a prueba de palabras parroquiales en tu imagen
Sí, apostaba a que no habría sonrisa pero el selfie no perdona
Pero algo falló pues a tu imagen llegan palabras
que se estrellan como pájaros perdidos de rumbo
y me obligan a estar barriendo el piso de avecillas muertas,
que son de especie no canora pero dan dolor de pecho
¿Si ves? En busca de lo natural, nadie es Monalisa
El torrente sigue su curso con lo verde al lado
llevando las tristes avecillas entre flujos de tinte oprobioso
por la mezcla de palabras descompuestas después de un año
de encierro y las que acaban de salir entre gases lacrimógenos
En ese puente hice tu fotografía sin haber leído las noticias