A campo traviesa y pinchando el cielo
se ven tres garzas con figura de acero
que saltan y saltan a ver la más alta
y las tres lo hacen con una sola pata.
Anidan en lo verde o en ciénagas de lata
donde hacen sus torres de cemento y malla
jalando con sus picos las vigas y los cables
para hacerse un nido y después largarse
a empezar nuevas torres que cortan el rumbo
de los rayos solares como los hizo el mundo.
Lo raro de las garzas que parecen hermanitas
es que hacen el nido ¡y después no lo habitan!